14 septiembre, 2013

陽關一疊


Painting of Ma Yuan, detail (Shanghai Museum)Pintura de Ma Yuan (1160 k-1225), detalle

Hace algún tiempo pusimos como acompañamiento musical a nuestro informe sobre la exposición del archivo de fotos de la Ruta de la Seda de Aurel Stein, celebrada en Hong Kong, la pieza clásica china «Tres variaciones sobre el paso de Yang», interpretada por Wu Wenguang al guqin, la cítara china de voz profunda que también suena en la magistral película de propaganda de Zhang Yimou, El héroe, con el músico ciego que la toca durante el primer enfrentamiento en la casa de té. Como esta canción fue escrita por Wang Wei (699-761), cuyo hermoso libro de poemas da nombre a nuestro blog mencionado aquí ayer, hemos decidido dedicar algunas palabras a esta composición suya, antes de que ruede por debajo de la quilla con los otros nudos que miden la velocidad del río Wang.


Wang Wei: 陽關三疊 – Tres variaciones sobre el Paso de Yang – Wu Wenguang, guqin solo

Traducimos el poema según el método que proponemos en «Casa de la Poesía de China». El texto original en caracteres chinos tradicionales va seguido por su transcripción para dejar sentir, aunque sea aproximadamente, la música del poema original. Aquí esto no es tan importante, pues adjuntamos también un archivo de audio, pero no siempre tenemos la fortuna de contar con este recurso. La equivalencia en español de cada palabra del poema se muestra en ventanas flotantes para percibir las estructuras de significado originales. Por último, damos nuestra traducción intentando que sea lo más literal posible. Por supuesto, la fuerza de los poemas chinos clásicos consiste en que, con palabras e imágenes muy simples, se crea un amplio espacio de asociaciones, al igual que ocurre en las pinturas chinas clásicas, que utilizan el vacío como medio básico de la composición. El resto va por cuenta del lector.


Painting of Ma Yuan, detail (Shanghai Museum)



渭城朝雨浥輕塵
客舍青青柳色新
勸君更盡一杯酒
西出陽關無故人。



wèichéng zhāo yŭ yì qīng chén
kèshè qīng qīng liŭ sè xīn
quàn jūn gèng jìn yī bēi jiŭ
xī chū yángguān wú gù rén


Wang Wei: 陽關三疊 – Tres variaciones sobre el Paso de Yang


En Wei la lluvia de la mañana
lava el tenue polvo

el verde renueva
los sauces de la posada

te lo pido, amigo, toma
otra copa de vino

pasando al oeste de Yang
no quedan amistades


In Wei the morning rain
washes off the light dust

green, newly green are
the willows at the inn

I urge you, my friend, to take
another cup of wine

to the west of Yang Pass
there are no old friends

El Yangguan («Paso del Sur», al sudoeste del famoso Paso de Yumen), construido por el emperador Wu (156-87 aC) fue el paso fronterizo más occidental del Imperio, a solo setenta kilómetros de las cuevas de Dunhuang en el borde del desierto de Taklamakan siguiendo la Ruta de la Seda, donde Aurel Stein descubrió –mil quinientos años después de la existencia de Wang Wei– varios miles de manuscritos que habían permanecido ocultos a generaciones de viajeros en una cueva-biblioteca. A partir de este lugar empezaba el territorio de los bárbaros. La expresión 西出陽關 xī chū yángguān del poema significa literalmente «salir del paso de Yang hacia el oeste», dejando atrás la civilización y todo lo conocido para adentrarse en la amenaza de lo Desconocido.

Qin Dahu: Leaving  the Yang Pass for the WestQin Dahu (1938), pintor del «realismo patriótico» de moda desde principios del los 90:
西出陽關 – Salida del Paso de Yang hacia el oeste

Otro título tradicional dado a este poema es «Adiós a Yuan Er en su misión a Anxi». El amigo de Wang Wei partió al reino bárbaro de Anxi para ofrecerles la alianza de los chinos contra los hunos. Esto explica el nombre de Wei en el poema. La ciudad estaba a la orilla del río Wei, en el extremo norte del territorio central, bajo firme control del ejército chino, unos miles de kilómetros antes del Paso de Yang. Los territorios al norte del río estaban bajo la amenaza de ataques de los bárbaros, por lo que quienes eran enviados hacia el oeste eran despedidos por sus amigos justo en este punto. Los Anales de la Dinastía Han, por ejemplo, dicen lo siguiente sobre la legendaria campaña de Li Guangli, en tiempos de Wu:

El General Li Guangli se disponía a dirigir el ejército para atacar a los hunos. El Primer Ministro lo acompañó hasta que cruzó el puente de Wei.

Esta canción se ha reelaborado varias veces desde que la escribiera Wang Wei, y se ha convertido en una pieza destacada del repertorio del guqin. Se llama «Tres variaciones» porque tradicionalmente se toca tres veces con variantes diferentes. También se suele interpretar hoy en día como canción de despedida. La hemos escuchado, por ejemplo, en el aeropuerto de Shenzhen como señal dada desde los altavoces al volver al oeste, hacia el Río de las Perlas.


Wang Wei: 陽關三疊 – Tres variaciones sobre el Paso de Yang – Liu Weishan (guzheng), Chen Jiebing (erhu), Zhao Yangqin (yangqin), Min Xiaofen (pipa) (5'28")


Wang Wei: 陽關三疊 – Tres variaciones sobre el Paso de Yang – Yu Hongmei, erhu (accompañado al guqin) (5'04")


Wang Wei: 陽關三疊 – Tres variaciones sobre el Paso de Yang – Dai Xiaolian, guqin solo (4'49")


Wang Wei: 陽關三疊 – Tres variaciones sobre el Paso de Yang – Interpretación anónima moderna del CD «Gu Yue Xin Yun» (Música antigua, Sonido nuevo) (7'08")

The Yang Pass todayEl Paso de Yang hoy

13 septiembre, 2013

Un orientalista vestido de derviche


Ármin Vámbéry ataviado como derviche, después de su regreso del viaje por Asia Central,
fotografiado en un estudio de Londres

Cuatro años atrás sólo dimos con esta foto para ilustrar la entrada dedicada al mulá Ishak, el joven teólogo de Jiva que se convirtió en discípulo de Ármin Vámbéry cuando éste viajó luego por Asia Central ataviado como derviche. Tan cercanos estaban que cuando Vámbéry se descubrió en Constantinopla, Ishak lo seguiría hasta el infiel Frengistán, para acabar convirtiéndose en bibliotecario de la Academia Húngara de Ciencias. Murió en Hungría, y su tumba en el cementerio rural de Velence es una especie de centro secreto de peregrinación para los orientalistas húngaros.


Hace poco hallamos en el número 1864/3 de la revista Az Orszag Tükre (El espejo del país) esta litografía realizada al llegar a Pest, donde se representa al mulá de pie junto a Vámbéry sentado con ropa derviche. Sus ojos vivaces y brillantes ponen el contrapunto al gesto grave de Vámbéry, reflejan su espíritu emprendedor y explican por qué Vámbéry se dirigió a él en la carta que le escribió como «ese pícaro mulá tártaro».




No es casualidad que encontráramos la revista justo unos días atrás. Hace tres años, cuando presentamos nuestra web sobre el mayor iranólogo húngaro, Sándor Kégl –recuerden: aquel hombre del gato–, compuesta para dar a conocer el material que guarda sobre él la Colección Oriental de la Biblioteca de la Academia Húngara de Ciencias, después de la ceremonia pública nos preguntaron: y ahora que hemos expuesto sistemáticamente el legado de los grandes viajeros orientalistas húngaros, Ibrahim Müteferrika, Sándor Kőrösi Csoma, Aurel Stein, Sándor Kégl, David Kaufmann –véase la lista completa aquí–, ¿cuándo nos dedicaremos al investigador quizá mejor conocido internacionalmente de entre todos ellos por su increíble talento para los idiomas y, en especial, por sus mil caras? El momento ha llegado.


Mañana se cumple el centenario de la muerte de Ármin Vámbéry, el pobre preceptor particular judío y el reconocido profesor universitario, derviche y diplomático, amigo personal del sultán turco, del sha de Persia y del primer ministro británico, fundador de la investigación oriental en Hungría. Mañana a las cinco de la tarde, en el congreso internacional celebrado en la Biblioteca de la Academia Húngara de Ciencias vamos a presentar la web preparada a partir de su legado conservado en la Colección Oriental, que ilustra, si no todas, al menos una docena de sus muchas caras. Después de la presentación publicaremos también el enlace aquí, y aún dedicaremos algunas entradas especiales en Poemas del Río Wang sobre los materiales incluidos y no incluidos en la web oficial. Vengan, escuchen y vuelvan luego a ver las novedades.