27 agosto, 2015

Contra el mal de ojo

Nazars contra el mal de ojo en una tienda de regalos de  Azerbaiyán, de la entrada Nazar de la Wikipedia

La amenaza del mal de ojo, así como sus antídotos, son bien conocidos en todo el Mediterráneo. Uno de ellos se difunde ahora por todos lados: un talismán de vidrio en forma de ojo que refleja contra el maligno la mirada dañina. De hecho, puede adoptar diversas formas. En las regiones árabes, la variante más efectiva es la hamza – «la mano de Fátima» –, con el ojo protector en la palma, mientras que de las regiones turcas procede este estilizado ojo de círculos concéntricos azules, el nazar.

El logo de la compañía aérea turca FlyAir, con el dibujo de un apotropaico nazar, y el talismán de nuestro destartalado bus de alquiler durante el reciente viaje a Azerbaiyán (con un logo debajo que celebra la toma de Constantinopla en 1453)


El peligro del mal de ojo es también familiar a la cultura tradicional judía, que lo combate con fórmulas apotropaicas parecidas. Además de la «Mano de Miriam», versión judía de la mencionada «Mano de Fátima», también encontramos esta información en la Wikipedia, en el artículo “Evil Eye”:

Muchos judíos practicantes evitan hablar sobre los objetos de valor que poseen, o sobre la buena suerte que hayan tenido, en particular sus hijos. Si alguna de estas cosas se menciona, quien habla y/o su oyente dirán: “b'li ayin hara” (hebreo), que significa “sin ningún mal de ojo”, or “kein eina hara” (yidis; a menudo abreviado en “kennahara”), “no hay mal de ojo”.

Podemos ver la variante visual exacta de este gesto en Quba, el asentamiento de los Judíos de Montaña, donde los acaudalados judíos caucasianos han ido edificando impresionantes palacetes de varios pisos, cubiertos de mármol, de un gusto y una ostentación similares a la de los «palacios gitanos» que encontramos en tantos pueblos de Transilvania y Maramureș. Y los protegen con la versión local, turca, del talismán, el nazar, contra cualquier corrosivo asalto de la inevitable envidia.

Nazar protector contra el mal de ojo en la puerta de un ostentoso palacete de unos Judíos de Montaña recientemente construido. Barrio de los Judíos de Montaña, Quba, Azerbaiyán

El nazar, tan popular entre los musulmanes de Azerbaiyán, salta a la vista en muchas otras casas del barrio de los Judíos de Montaña azerís, a menudo al lado de los «mezuzá samaritanos», hechos de piedra, de los que hablaremos próximamente.

Nazar protector del mal de ojo, junto a un “mezuzá samaritano”, en la cancela de una casa de Judíos de Montaña. Barrio judío, Quba, Azerbaiyán

La preparación a la vida adulta nunca empieza demasiado pronto. La industria de chucherías apoya así a la juventud de Azerbaiyán con los caramelos «Nazar». No solo el nombre nos recuerda el amuleto contra el mal de ojo, la bolsa muestra también el conocido talismán. Obviamente contra la envidia de los amiguitos que no tengan una.

Caramelos de Azerbaiyán “Nazar”, con el talismán protector contra el mal de ojo. Foto de Dani Kálmán en una tienda de carretera cerca de Quba

20 agosto, 2015

Disolución: Fibonacci




Esta foto de la sesión del 8 de abril del año pasado del Parlamento de Ucrania, analizada en sus proporciones, puede sugerir tres cosas al observador.

Para un extraterrestre, que los terrícolas ejecutan todas sus acciones, hasta las más espontáneas y apasionadas, siguiendo unas complejas reglas rituales, como una gran danza.

Para un terrícola, que la regla áurea todo lo define.

Para un terrícola cínico, que con un poco de esfuerzo el molde de la regla áurea puede aplicarse a cualquier cosa.

Sabe el fotógrafo que hasta que empezó a fotografiar parlamentos ha visto, elogiado y captado él mismo miles de imágenes dotadas de la regla áurea. Así se forma el hábito y se elige para la publicación, entre docenas de tomas, las que más se le aproximen, y si fuera necesario se ajustarán (aquí, cortando las manos derechas, sacrifica una forma piramidal perfecta a la regla áurea).

Y un historiador del arte sabe que la regla áurea como ley universal solo debe analizarse en aquellas  imágenes donde pueda dibujarse limpiamente.